miércoles, 1 de enero de 2014

sábado, 2 de octubre de 2010

miércoles, 3 de febrero de 2010

Jabalís- "La extraña ficción" CAPÍTULO 2

Capítulo 2 JABALÍS: En busca de los jabalís, dónde los encontramos, dónde los habíamos ido a buscar, qué sabíamos de ellos...

"La extraña ficción" CAP.2 from RPrieto9 on Vimeo.

martes, 26 de enero de 2010

Documental: "La extraña ficción" CAPÍTULO 1

Documental por capítulos de la grabación del corto "la extraña en penumbra". En éste capítulo salen imágenes de la grabación de forma aleatoria.
El final del video tiene sorpresa!

"La extraña ficción" CAP.1 from RPrieto9 on Vimeo.

lunes, 11 de enero de 2010

Eric Rohmer

Ha muerto un genio del cine.Hacía un cine realista, que captaba la belleza de la realidad sin artificios.Cine a la vez contemplativo y a la vez dramático.Con historias minimalistas, sutiles y con una perfección, un REALISMO y una BELLEZA insuperables.Cine sin música.Mi director favorito.



Muchas veces cuando en tu vida te pasa algo que en realidad es "poca cosa" desde un punto de vista dramático o simplemente es una sensación, y te apetece contarla en imágenes (como puede ser la sensación de alegría del verano) a la hora de transformarla en guión, cortometraje, en película, se tiende a tranformar del todo, caricaturizando esa situación para llegar a su esencia e inevitablemente se convierte en otra cosa.

Rohmer no caricaturizaba sino que intentaba ser lo más fiel a la realidad, lo más realista, lo más detallista y a la vez expresarlo con la máxima belleza. Y eso convierte a sus películas en únicas.

Películas en las que no utilizaba planos con significado (planos dramáticos) y en las que no utilizaba música. Porque tanto los planos dramáticos como la música (como otros artificios, también puramente cinematográficos) convierten la película en algo contado. O almenos te remarcan que has ido a ver algo contado.

Una película con música, con planos que tienen significado por si mismos, etc. sería el equivalente a un amigo que te dice: Te voy a CONTAR algo increíble, ya verás qué bueno: y te lo cuenta con sus propias palabras, con toda su intención de que te agrade y te hagas una idea de lo que fué. Y si el amigo sabe contar bien la historia te gustará. Y cuánto más dominio tenga del lenguaje mejor.
Pero una película sin música, sin planos con significado, sería el equivalente a un amigo que te dice: Vente! Y te lleva a un sitio donde hay una pared con un agujero y te dice: mira.
Y lo que ves te puede gustar o no (es cuestión de que haya elegido con buen criterio lo que te ha llevado a ver).

Yo prefiero que me enseñen algo a que me lo cuenten. La música, los planos con contenido dramático, etc. te recuerda que te están contando algo. La música convierte la imagen en una ilustración (le quita a la imagen la propia música que lleva de forma intrínseca, le quita la connotación, le quita el sonido ambiente que la convierte en real, la convierte en una fotografía sin vida, le quita su musicalidad y le da otra: la convierte en otra cosa).

En las películas de Rohmer el diálogo es parte fundamental de las mismas.
Sus historias avanzan a través de las relaciones entre los personajes y los diálogos más que por acciones dramáticas contundentes. Rohmer apostaba por un cine hablado, por el juego de contradicciones que se dan entre lo que hablamos, lo que pensamos y lo que luego hacemos. Hacía películas de conversaciones.

Eric Rohmer deja alrededor de unas 30 películas, todas ellas de una grandísima calidad.
Recomiendo a todo el mundo que le guste el cine y no haya visto ninguna película suya que vea almenos una por curiosidad.
Quizás, una vez vista, te apetezca ver el resto.
Entre todas las que tiene si tuviera que recomendar sólo una, sería mi favorita: Cuento de verano. Pero todas rozan la perfección y son muy agradables de ver: La coleccionista, La rodilla de Clara, Cuento de invierno...

Viva Rohmer.